Reflexiones de Ramón D. Dopazos (III)


Diario N° 7 – Hoja 84. Análisis express sobre el pasado, el presente y el futuro desde la óptica de un formícido ensimismado en tiempos de veraneo.



Será la lapicera de mi abuela que ya no escribe (N.d.A. ninguna de ellas). Será la casa en la costa, sudore da mio nonno. O el surtido vaticinio de pájaros y sus sendos cánticos de sonidos símiles ukelelescos (a mi entender) que siempre decoraron las veraniegas mañanas montermoseñas de esta ciudad olvidada durante el año, de este barrio alejado del cemento. Solapados y encapuchados tras el aroma a caffé fatto in casa y a pan tostado se dan a conocer los insurgentes y ya trillados fantasmas del anteayer. Vuelven a desfilar uno a uno los pies de tiempos de sepia y estufas a leña y así logró asimilar y comprender por qué soy lo que soy (y lo que fui y lo que no pude ser). Y mientras transgrede este trance/divague meloso/nostálgico caigo en la incertidumbre de reflexionar o no acerca de loqueseviene (Oh!). Como no creo en los superpoderes ni en los supermilagros ni en elconmayusculayacento, por descarte y en fase eliminatoria, me asemejo más acertadamente a una hormiga colorada (nc. Acromyrmex striatus). Soy de pequeñas dimensiones, siempre con la espalda sobrecargada, la mayoría cree que soy de preferencia omnívora y muerdo cuando me asusto. Así encaro con el esternón los posibles años venideros (¿remotos?). A todo esto requiérase adjuntarle y sumarle mi durante (sin. el ahora, right now, status quo) y como anoche llovió mucho sobre el techo de chapa mi ahora es de quietud, de estado de rumia, de pace (peace o paz). Encuentro en el silencio matutino el afán por entubar y escribir y así, en la tertulia gominosa de letras, me encuentro. Mientras tanto febo asoma y yo me predispongo, ya en versión súper-light bien lograda, a bajaralaplaya a mutarme entre rojocamarón y verdemate.


(Carrying the esterilla baby!). Acta est fabula.



9 de enero del 2011, Monte Hermoso, Buenos Aires, Argentina.